Director ejecutivo de la AIE: Sin mayor colaboración “la transición a cero emisiones netas podría retrasarse décadas”

ESTAMBUL

El director ejecutivo de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), el turco Fatih Birol, advirtió que, sin una mayor colaboración entre los países, “la transición a cero emisiones netas será mucho más desafiante y podría retrasarse décadas”.

En una nota de prensa, la AIE anunció este martes la publicación del primer informe anual del compromiso conocido como la Agenda de Avance (Breakthrough Agenda).

El compromiso fue adoptado durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), celebrada en la ciudad escocesa de Glasgow entre el 31 de octubre y el 13 de noviembre de 2021, mientras que el informe fue solicitado por 45 líderes mundiales que participaron en ella.

Durante la COP26, 45 países se comprometieron a hacer de las tecnologías limpias la opción más asequible, accesible y atractiva en cada uno de los principales sectores emisores de gases de efecto invernadero (GEI) para 2030 en el marco de la Agenda de Avance.

Esta agenda tiene como objetivo alinear las acciones de los países y coordinar la inversión para ampliar la implementación y reducir los costos en cinco sectores clave: energía, transporte terrestre, acero, hidrógeno y agricultura.

Estos cinco sectores representan casi el 60% de las emisiones globales de GEI en la actualidad y podrían generar la mayor parte de las reducciones de emisiones necesarias para 2030, contribuyendo significativamente en la limitación del calentamiento global a un máximo de 1,5°C, en línea con los objetivos del Acuerdo de París de 2016.

Más colaboración

En la introducción del Informe de la Agenda de Avance 2022, Birol afirma que “estamos en medio de la primera crisis energética verdaderamente global” y señala que esta crisis está teniendo “consecuencias devastadoras para toda la economía mundial, especialmente para los países en desarrollo”.

Birol asegura que “solo podemos lograr una seguridad energética duradera acelerando la transición hacia una energía limpia y sostenible” ya agrega que “podemos hacer que la transición sea más rápida, más barata y más fácil para todos a través de la colaboración internacional, gracias a una innovación más rápida, mayores economías de escala, mayores incentivos para invertir, igualdad de condiciones y beneficios que se comparten en todos los sectores de la sociedad”.

El director general de la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA, por sus en inglés), el italiano Francesco La Camera, señaló que “la crisis energética y climática ha expuesto las debilidades y vulnerabilidades de un sistema que depende, en gran medida, de los combustibles del siglo XX” y recalca que “todo lo que no sea una acción radical e inmediata eliminará, en última instancia, la posibilidad de cumplir con el objetivo de 1,5°C”.

La Camera indica que “la Agenda de Avance y nuestro informe conjunto envían una fuerte señal, antes de la COP27, de que una mayor colaboración internacional puede aumentar la ambición y acelerar el progreso” y enfatiza que “avanzar en la transición a las energías renovables es una opción estratégica para brindar energía asequible, empleos, crecimiento económico y un medioambiente más limpio a las personas sobre el terreno”.

Ver también: Director de la Agencia Internacional de Energía: El mundo pasa por su primera crisis energética mundial

Uno de los dos campeones de alto nivel del Cambio Climático de la ONU, el egipcio Mahmoud Mohieldin, señala que “este informe destaca la necesidad de garantizar un acceso asequible a fuentes de energía limpias y verdes para todos” y añade que también es “un fuerte recordatorio sobre la necesidad de centrarse en la implementación”.

Mohieldin indica que la implementación debe ser “la prioridad a nivel nacional, regional y local a la hora de conseguir el impacto necesario a nivel mundial, así como de movilizar la financiación adecuada”.

Por su parte, el segundo campeón de alto nivel, el británico Nigel Topping, dice que “los países con miles de actores no estatales que ejecutan la Carrera a Cero y la Carrera Hacia la Resiliencia deben colaborar más fuertemente para impulsar la transición hacia soluciones asequibles de cero emisiones en cada sector emisor de la economía”.

Topping asegura que “esto es tan esencial para el desarrollo como para evitar un cambio climático peligroso” y afirma que, “en la COP27, se deben tomar medidas claras para implementar el compromiso de la Agenda de Avance con una acción colectiva que haga que las tecnologías limpias sean asequibles y estén disponibles para todos los que las necesitan en todo el mundo”.

El informe

El informe fue elaborado por la AIE, la IRENA y el equipo de los campeones de alto nivel del Cambio Climático de la ONU.

Se trata de “la primera evaluación de prioridades para una acción colaborativa fortalecida y su progreso realizada hasta el momento” que “entrega un informe de progreso sobre las acciones necesarias para cumplir con el compromiso histórico de tecnología limpia de los Gobiernos que representan dos tercios de la economía mundial”, según la AIE.

En el contexto de la crisis energética y de la amenaza de una crisis alimentaria mundial, los autores expertos del informe instan a los líderes de la COP27 a seguir adelante con acciones que deberían acelerar, en cuestión de décadas, el progreso hacia la meta de cero emisiones netas, reducir los costos de energía e impulsar la seguridad alimentaria para miles de millones de personas en todo el mundo.

El informe reconoce un aumento en la cooperación internacional práctica en los últimos años, así como un progreso en el despliegue de las tecnologías necesarias.

En este sentido, el informe apunta a una duplicación de las ventas de vehículos eléctricos en 2021 respecto al año anterior, hasta un nuevo récord de 6,6 millones de unidades, y a un aumento previsto en la capacidad renovable global del 8% en 2022, superando la marca de 300 gigavatio (GW), el equivalente a alimentar aproximadamente 225 millones de hogares, por primera vez.

Así mismo, el informe pronostica una reducción de los costos de generación de electricidad global de al menos USD 55.000 millones en 2022, según la nueva capacidad renovable agregada en 2021.

No obstante, el informe también advierte que se necesita una cooperación internacional mucho mayor para que el mundo se encamine hacia el cumplimiento de sus compromisos climáticos.

Recomendaciones

El informe presenta 25 recomendaciones para que los líderes aborden durante el Foro de Acción Mundial sobre Energía Limpia de Pittsburgh y la 13ª Conferencia Ministerial sobre Energía Limpia, previstos celebrarse entre el 21 y el 23 de septiembre en el estado de Pensilvania, Estados Unidos, entre las cuales destacan:

Demostrar y probar sistemas de energía flexibles con bajas emisiones de carbono para ampliar la gama de soluciones y aumentar la proporción de energías renovables variables.

Crear nuevas superredes transfronterizas durante esta década para aumentar el comercio de energía baja en carbono, reducir las emisiones, mejorar la seguridad energética y mejorar la flexibilidad del sistema.

Establecer nuevos centros internacionales de experiencia a fin de canalizar la financiación y la asistencia técnica para ayudar en la transición a los países productores de carbón.

Acordar una definición común y fechas meta en las que todos los vehículos de carretera nuevos tengan cero emisiones netas, con el objetivo de 2035 para automóviles y furgonetas, y la década de 2040 para vehículos pesados.

Movilizar la inversión en infraestructura de recarga, incluida la asistencia prioritaria para los países en desarrollo, y armonizar los estándares internacionales de recarga para impulsar la inversión y acelerar la adopción a nivel mundial.

Adoptar estándares para impulsar la reciclabilidad de las baterías y la investigación de sobrealimentación en sustancias químicas alternativas para baterías a fin de reducir la dependencia de metales preciosos como el cobalto y el litio.

Implementar políticas gubernamentales y comprometerse, por parte del sector privado, a comprar determinadas cantidades para impulsar la demanda y la generalización del hidrógeno renovable bajo en carbono, así como la adoptación de estándares para permitir el comercio global.

Comprometerse, por parte de los sectores público y privado, a comprar acero de emisiones casi nulas y tomar acciones para nivelar la competencia entre las naciones productoras de acero.

Invertir en tecnologías y prácticas agrícolas que puedan reducir las emisiones del ganado y los fertilizantes, ampliar la disponibilidad de proteínas alternativas y acelerar el desarrollo de cultivos resistentes a los cambios climático.

Adoptar estándares internacionales para monitorear e informar sobre el estado de los recursos naturales de los que depende la agricultura. Estos deberían cubrir el estado de la salud del suelo, el contenido de carbono del suelo y la salud de los polinizadores.

El informe menciona las estimaciones de la IRENA, las cuales sugieren que una transición energética alineada con la limitación del aumento de la temperatura global a 1,5°C podría crear cerca de 85 millones de puestos de trabajo adicionales para 2030 en comparación con 2019, compensando con creces las pérdidas de 12 millones de puestos de trabajo.