Condenan violencia contra sedes de la Iglesia católica en Nicaragua

El arzobispo de Managua, Leopoldo José Brenes, condenó los actos cometidos este martes contra dos sedes de la Iglesia católica en Nicaragua, en medio de la aguda crisis sociopolítica que vive el país centroamericano desde el 18 de abril pasado.

Uno de ellos ocurrió en la parroquia La Candelaria, del municipio de la Trinidad, departamento de Estelí, que, según detalló Brenes a través de un comunicado, fue rodeado por miembros de la Policía Nacional y grupos paramilitares, “causando temor a sacerdotes y fieles en su interior”.

“Pido a la dirección nacional de la policía suspender dicha acción de acoso, para que dichos fieles puedan retornar a sus hogares”, añadió el prelado.

De igual forma, la Arquidiócesis de Managua reprobó una agresión cometida hacia un equipo periodístico de la Diócesis de Matagalpa, “quienes se disponían a dar cobertura de la labor profética de los sacerdotes” de la diócesis de Estelí en el sector de La Trinidad, norte del país. A los periodistas les robaron sus cámaras y material de trabajo.

El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, Silvio José Báez, se unió al rechazo y condenó este hecho. “Intolerable atentar contra la libertad de prensa”, dijo el líder religioso a través de un mensaje en sus redes sociales.

Una incursión de unos 40 vehículos antimotines y civiles armados y encubiertos dejó al menos un muerto en La Trinidad, a 125 km al norte de Managua, cuando desmontaron un ‘tranque’ (bloqueo) que se mantenía en una importante carretera.

Según el último informe de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH), desde el inicio de la crisis han muerto 309 personas.

Además, de acuerdo con otro informe de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, un colectivo conformado por estudiantes, campesinos, empresarios y representantes de la sociedad civil, el Gobierno nicaragüense ha incumplido la mayoría de acuerdos alcanzados en el proceso de diálogo nacional.