La comunidad palestina en Latinoamérica condenó el ataque cometido por fuerzas de seguridad israelíes en la mezquita de Al-Aqsa, en la ocupada Jerusalén Este, que dejó al menos 305 personas heridas.

Los hechos ocurrieron cuando miles de palestinos realizaban protestas dentro del complejo de la mezquita luego de las oraciones del amanecer. Algunos crearon barreras en puntos de Haram al-Sharif, el edificio principal de Al-Aqsa, corearon consignas en honor a la mezquita y dijeron que no se irían de allí.

Luego la Policía israelí allanó el centro religioso y disparó gases lacrimógenos, balas de goma y granadas paralizantes en los enfrentamientos con los palestinos, que respondieron arrojando piedras.

La Federación de Entidades Argentino-Palestinas, miembro de la Confederación Palestina Latinoamericana y del Caribe (Coplac), aseguró que “cientos de palestinos y palestinas” fueron víctimas de “provocaciones, vejámenes y agresiones propiciados por colonos de los asentamientos ilegales (que) han sido operativizados por las fuerzas de la ocupación”.

Ver también: Turquía invita a la comunidad internacional a rechazar el terrorismo de Estado ejercido por Israel

“El desalojo se llevó a cabo mediante una salvaje represión, resultado de una devastación de la mezquita y la más feroz violencia contra la población civil palestina”, dijo la Federación en un comunicado.

Al mismo tiempo, instó al Gobierno, demás autoridades en Argentina y a la comunidad internacional a “pronunciarse enérgicamente condenando estos atroces actos que violan el derecho internacional, atentan contra el derecho al libre culto y la dignidad de los pueblos”.

“Levantemos nuestras voces ante la depredación de los territorios y los bienes de las víctimas del colonialismo más perverso, sancionando la cara más infame del Apartheid israelí”, concluye la nota de prensa.

La Coplac, por su parte, ha manifestado su rotundo rechazo por los “graves hechos” que se producen en el barrio palestino Sheikh Jarrah, también en Jerusalén Este.

❮❯

La Policía israelí interviene ante manifestación palestina en la mezquita de Al Aqsa en Jerusalén Este

Al menos 305 personas resultaron heridas cuando la Policía israelí irrumpió en la mezquita de Al Aqsa, en la ocupada Jerusalén Este, y atacó a palestinos que estaban en guardia para evitar ataques por parte de judíos extremistas este lunes 10 de mayo. ( Mostafa Alkharouf - AA )

“Venimos a manifestar nuestro repudio al accionar israelí, que una vez más y ante la inacción de los organismos internacionales y multilaterales, intenta proseguir con el robo institucionalizado, la violencia y el sometimiento de todo un pueblo”, dijo Rafael Araya, presidente de la Confederación, en un comunicado aparte.

Araya “apeló a la solidaridad” de gobiernos y organizaciones de la sociedad civil en el continente para “frenar de una vez la usurpación de tierras y bienes, la opresión y la ocupación ilegal del territorio palestino”.

Las tensiones han aumentado en Sheikh Jarrah desde la semana pasada, cuando los colonos israelíes irrumpieron en el área después de que un tribunal israelí ordenó el desalojo de familias palestinas.

La mezquita Al-Aqsa es el tercer lugar más sagrado del mundo para los musulmanes. Los israelíes llaman al área el "Monte del Templo", alegando que fue el sitio de dos templos judíos en la antigüedad.

Israel ocupó Jerusalén Este durante la guerra árabe-israelí de 1967 y anexó la ciudad entera en 1980, una medida que nunca ha sido reconocida por la comunidad internacional.