Colombia: nueve campesinos murieron en un enfrentamiento del Ejército
Reportes de una organización colombiana afirman que la fuerza pública abrió fuego contra un grupo de cultivadores de coca que se oponía a la erradicación forzada en el municipio de Tumaco, en el sureste de Colombia.
BOGOTÁ, Colombia
La Asociación de los Ríos Mira Nulpe y Mataje, que reúne a comunidades campesinas asentadas en la Zona de Alto Mira y Frontera, del corregimiento de Llorente, en Tumaco, al sureste de Colombia, informó que nueve campesinos perdieron la vida luego del “proceder desmedido de la Fuerza Pública frente a los campesinos indefensos que se encontraban manifestando pacíficamente, exigiendo el cumplimiento de los acuerdos de La Habana”.
La asociación denuncia que otros 18 campesinos resultaron heridos por la acción de la Fuerza Pública.
“Después de varios días de resistencia de parte de las comunidades campesinas, el 4 de octubre de 2017, los ánimos se ven alterados debido a la provocación suscitada entre miembros de la Fuerza Pública y la población civil que finalmente desencadena disparos de arma de fuego por parte de los uniformados con los resultados funestos para la comunidad del Alto Mira y Frontera”, aseguró la asociación.
El Ejército emitió un comunicado afirmando que “las autoridades competentes iniciaron las investigaciones tendientes a esclarecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar de este reprochable hecho”.
La versión de la fuerza pública es que la columna móvil que adelantaba procesos de erradicación forzada en Puerto Rico (Nariño), fue atacada por un grupo armado disidente de las Farc. Afirman que los hombres “lanzaron al menos cinco cilindros bomba contra los integrantes de la Fuerza Pública y contra la multitud, que se encontraba en el lugar, y luego atacaron con fuego”.
Pero los defensores de derechos humanos afirman que los campesinos no tenían armas ni recibieron ningún impacto de bombas caseras.
“Los campesinos tenían piedras y palos y manifestaron que no iban a permitir que les arrancaran una mata de coca más y la Fuerza Pública respondió con armas de fuego”, contó la coordinadora nacional de desplazados en Tumaco, Diana Montilla.
La coordinadora añadió que no es creíble la versión de los cilindros bomba porque “todos los heridos tienen marcas de arma de fuego, ningún reporte de heridos nombra por ejemplo esquirlas, que es lo que sucede cuando explota un cilindro bomba”.
Este enfrentamiento entre los campesinos y el Ejército es producto de una labor de erradicación forzada que desarrollaba la fuerza pública desde hace cuatro días. La comunidad se opuso a la medida y al inicio optó por una protesta pacífica.
Los defensores cuentan que el pasado miércoles los enfrentamientos se volvieron violentos y dos campesinos resultaron heridos y tuvieron que ser trasladados a Ecuador para que los atendieran.
El CTI de la Fiscalía realizó el levantamiento de los cuerpos y se espera que investigue a fondo las causas del fallecimiento.
