Ciclismo, bueno para la salud y distanciamiento social, según experto en este medio de transporte
El director de una asociación de ciclismo turca Esat Emanet afirma que practicando la actividad se puede contribuir a controlar la expansión de la pandemia del COVID-19.
Algunas personas son vistas en las calles de Londres después de que el Gobierno británico ordenara el cierre de bares, cafés, tiendas, mercados, entre otros, como medidas de protección contra el brote de coronavirus (COVID-19) en Londres, Reino Unido, el 21 de marzo. (İlyas Tayfun Salcı - Agencia Anadolu)
ANKARA, Turquía
El ciclismo ayuda a las personas a mantener distancia con otras al momento de transportarse en medio de la pandemia del coronavirus y también contribuye a la salud de quienes lo practican, aseguró Esat Emanet, director de la Asociación de la Industria de Bicicletas (BISED) de Turquía.
“Los ciclistas se pueden aislar de las interacciones en el camino y así contribuir a su salud”, afirmó Emanet en entrevista con la Agencia Anadolu.
Emanet hizo hincapié en el hecho de que el ciclismo podría jugar un papel para contribuir al distanciamiento social, así como a las medidas adicionales en términos de higiene, que según él pueden ser críticas para contener la propagación del COVID-19.
“El transporte público es tal vez una de las áreas que poseen el riesgo más alto. Por esta razón, en Nueva York, las ventas de bicicletas y su uso se han disparado desde el brote del COVID-19. Las mismas prácticas simples también pueden ser vistas en nuestro país”, agregó el director.
Amanet advirtió también que el transporte público puede comprometer el distanciamiento social.
“Una simple revisión a nuestro presupuesto para el transporte público o para un vehículo hoy nos podrían permitir adquirir una bicicleta nueva”.
La enfermedad del coronavirus 2019 (COVID-19) es una afección respiratoria que se puede propagar de persona a persona. El COVID-19 se identificó por primera vez en un brote en Wuhan, China en diciembre del año pasado, y se ha extendido a cerca de 164 países y territorios.
La Organización Mundial de la Salud declaró el brote como una pandemia global el pasado miércoles 11 de marzo.
De más de 383.900 casos que han sido confirmados, 101.900 se han recuperado, mientras que las muertes superan las 16.000, según los datos recopilados por la Universidad Johns Hopkins en EEUU.
A pesar del creciente número de casos, la mayoría de las personas infectadas sufren sólo síntomas leves y se recuperan.
*Daniela Mendoza contribuyó con la redacción de esta nota.
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