Política, Mundo
Canciller de Nicaragua: No invitaremos a observadores de la OEA a las próximas elecciones presidenciales
En entrevista con la Agencia Anadolu, el canciller nicaragüense, Denis Moncada Colindres, asegura que la situación en el país es estable y normal pese a las denuncias de encarcelamiento y malestar político.
Aicha Sandoval Alaguna y Behlul Cetinkaya |
14.10.2021 - Actualızacıón : 20.10.2021
El ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua, Denis Moncada Colindres, durante una rueda de prensa conjunta tras su reunión con el ministro de Relaciones Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglu, en Ankara, Turquía, el 13 de octubre de 2021. (Fatih Aktaş - Agencia Anadolu)
ANKARA
El ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua, Denis Moncada Colindres, llevó a cabo una visita oficial a Turquía para abordar temas de interés común y firmar acuerdos en diversos campos.
En el marco de su visita de dos días, Moncada, quien llegó al cargo hace cuatro años, se reunió con el ministro de Relaciones Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, y con la ministra de Agricultura y Silvicultura de Turquía, Bekir Pekdemirli.
En entrevista exclusiva con la Agencia Anadolu, el también exembajador de Nicaragua ante la Organización de Estados Americanos (OEA) habló sobre la situación política del país, las tensiones con la Iglesia nicaragüense, las próximas elecciones presidenciales y las relaciones con Turquía.
¿Cuál es ambiente político actual en Nicaragua en vista de las denuncias de encarcelamiento de opositores y qué se espera de las próximas elecciones presidenciales?
Nicaragua vive una situación normal, estable, de paz, trabaja normalmente, produce y se están garantizando la seguridad alimentaria y de salud de nuestra población. Nicaragua es un país diferente al que se quiere hacer creer en los medios de comunicación internacionales, especialmente aquellos que están bajo la influencia de Estados Unidos y algunos países europeos.
Se aproxima un proceso electoral en el marco de la Constitución Política de Nicaragua y las leyes electorales que contará con la libre participación de los partidos políticos legalmente constituidos, que tienen personalidad jurídica y que están participando de forma individual o en alianza. Los comicios se llevarán a cabo en un calendario que ha sido consensuado entre las autoridades electorales de Nicaragua y los partidos políticos participantes. Es decir, Nicaragua vive una situación de normalidad y estabilidad.
¿De qué países o instituciones serán enviados observadores?
Las autoridades correspondientes están organizando las invitaciones que se dirigirán a personalidades expertas en materia electoral de diferentes países, pero debo decirle claramente que la posición de nuestro Gobierno es no invitar a la OEA después de su participación en un golpe de Estado en Bolivia. Nosotros no podemos invitar a alguien que ha participado en la promoción y ejecución de un golpe de Estado contra un país democrático como es el caso de Bolivia.
¿Por qué el presidente Daniel Ortega aspira a un nuevo periodo presidencial?
Es una forma de voluntad popular. La experiencia en Nicaragua nos ha demostrado que cuando ha habido algunos cambios, y eso fue la experiencia de los 16 años anteriores de gobiernos neoliberales, lo que ocurre es el retroceso de las conquistas populares en beneficio de la población y la sumisión en la pobreza, la explotación, la carencia de programas y proyectos que nos beneficien. La población ha experimentado que un gobierno es positivo en la medida que tiene en cuenta a los seres humanos, a los ciudadanos como centro de sus políticas y ese es el caso del Gobierno del presidente Ortega y de la compañera Rosario Murillo. La población concibe que es un buen gobierno, que es su gobierno. Por eso en Nicaragua se habla del “pueblo presidente” (que el presidente es el pueblo). Ese es el elemento que determina, porque la población nicaragüense considera y demanda que el presidente Ortega continúe con un nuevo periodo presidencial para garantizar sus derechos, los derechos que han sido retomados.
Esperamos un triunfo muy exitoso del Frente Sandinista de Liberación Nacional. Hemos hecho un buen gobierno, con políticas económicas y sociales universales, incluyentes y gratuitas encaminadas a lograr el bienestar de nuestra población.
El presidente Daniel Ortega ha criticado a la Iglesia en el país por su actitud opositora mientras que esta institución dice que está trabajando por la paz. ¿Cuál es la fuente del problema entre la Iglesia y el Gobierno, y qué se está haciendo para solucionar esta situación?
Nosotros somos muy respetuosos con las expresiones religiosas: el abanico amplio y multicolor de religiones que hay en Nicaragua. Sin embargo, en el caso de Nicaragua se dio en 2018 un intento de golpe de Estado y, lamentablemente, porque se lamenta que alguien que ocupa un cargo direccional en organizaciones importantes como las religiosas, en lugar de hacer el papel que le corresponde, mezcla la actividad política y lleva a cabo actividades ilegales, ilegítimas y de rompimiento del orden constitucional de un país al intentar dar un golpe de Estado real y práctico.
El presidente Ortega expuso que después de las elecciones, que son el 7 de noviembre de este año, hay que retomar las conversaciones, el diálogo amplio con los diferentes sectores sociales, económico, político e, indudablemente, religioso del país.
¿Qué puede decir sobre la presión que ejerce EEUU a algunos países de Latinoamérica, incluido Nicaragua?
Mantenemos una posición muy clara de rechazo y de condena de esas políticas de injerencia. Definitivamente violentan el derecho internacional, la Carta de la ONU y principios y valores importantísimos para los pueblos del mundo, por ejemplo, los de América Latina y el Caribe, y también el de Turquía. Los Estados y los pueblos tienen el derecho inherente, soberano y digno de definir sus políticas internas e inclusive externas, respetando el derecho internacional y la Carta de la ONU, que es lo que no pasa con EEUU y algunos países europeos que, como imperios que son, siempre realizan acciones de agresión contra los países, buscando incidir en sus políticas internas y retomar vías políticas de dominación y de hegemonismo.
¿Cuál es la posición de Nicaragua con respecto a la extensión de las sanciones por parte de la Unión Europea?
Reitero que para nosotros esas medidas unilaterales, ilegales, arbitrarias, que le llaman sanciones, son la expresión precisamente de potencias que creen que pueden dominar a los demás países y a los demás pueblos. Nosotros hemos dicho muy claramente que rechazamos ese tipo de medidas; no estamos de acuerdo con ellas porque quieren tener una aplicación extraterritorial que realmente no tiene sentido ni justificación. Nos solidarizamos también con otros Estados, con Turquía y otros países de América Latina que sufren realmente este tipo de medidas.
¿Qué medidas está tomando su Gobierno para hacer frente a la migración a gran escala de nicaragüenses a Estados Unidos?
Como usted sabe, hay realmente un fenómeno migratorio de otros países que tiende a ser a veces masivo. En el caso de Nicaragua, no tenemos una migración masiva ni extraordinaria, sino dentro de la escala de lo normal de las migraciones ya tradicionales que se producen en los países de la región centroamericana. Precisamente la migración de Nicaragua ha disminuido en la medida en que nuestras políticas internas tienen como centro a la población y vamos mejorando, avanzando y desarrollando políticas económicas-sociales que le dan a la población seguridad ciudadana, alimentaria, hospitalaria, educativa.
Muchas veces también se utiliza ese tipo de situaciones para tergiversar la realidad y mostrar como si en Nicaragua estuviéramos en una situación altamente preocupante, lo cual no es cierto.
¿Cómo son las relaciones entre Nicaragua y Turquía? ¿Piensa Managua abrir una embajada en suelo turco?
Las relaciones entre Turquía y Nicaragua son relaciones muy buenas y con una comunicación fluida, constructiva y positiva. Hemos estado conversando con el canciller turco Mevlut Cavusoglu y precisamente ayer (13 de octubre) suscribimos acuerdos de cooperación entre nuestros dos países en los campos de la agricultura, educación y consultas políticas. Hemos avanzado también en los acuerdos sobre cooperación mutua de promoción y seguridad de las inversiones en nuestros dos países. Estos acuerdos expresan de forma concreta cómo nuestras relaciones son positivas y avanzan para ampliar y fortalecer la cooperación, los intercambios, las inversiones, las relaciones culturales.
También encontramos que nuestras naciones tienen identidades similares en la política exterior. Establecemos cooperación mutua en organismos internacionales. Sumado a esto, tanto Turquía como Nicaragua fortalecen la defensa del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas, así como también el principio de no injerencia en los asuntos internos de los Estados. Además, practicamos las relaciones internacionales de una forma respetuosa y de igualdad soberana. Estos elementos contribuyen al fortalecimiento de relaciones amistosas, de cooperación y de solidaridad.
Hemos estado conversando con las autoridades de Turquía y dentro de nuestros proyectos y planes se encuentra abrir una embajada de Nicaragua aquí en el país lo más pronto posible.
El sitio web de la Agencia Anadolu contiene sólo una parte de las historias de noticias ofrecidas a los suscriptores en el Sistema de Difusión de AA News (HAS), y en forma resumida.
En el marco de su visita de dos días, Moncada, quien llegó al cargo hace cuatro años, se reunió con el ministro de Relaciones Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, y con la ministra de Agricultura y Silvicultura de Turquía, Bekir Pekdemirli.
En entrevista exclusiva con la Agencia Anadolu, el también exembajador de Nicaragua ante la Organización de Estados Americanos (OEA) habló sobre la situación política del país, las tensiones con la Iglesia nicaragüense, las próximas elecciones presidenciales y las relaciones con Turquía.
¿Cuál es ambiente político actual en Nicaragua en vista de las denuncias de encarcelamiento de opositores y qué se espera de las próximas elecciones presidenciales?
Nicaragua vive una situación normal, estable, de paz, trabaja normalmente, produce y se están garantizando la seguridad alimentaria y de salud de nuestra población. Nicaragua es un país diferente al que se quiere hacer creer en los medios de comunicación internacionales, especialmente aquellos que están bajo la influencia de Estados Unidos y algunos países europeos.
Se aproxima un proceso electoral en el marco de la Constitución Política de Nicaragua y las leyes electorales que contará con la libre participación de los partidos políticos legalmente constituidos, que tienen personalidad jurídica y que están participando de forma individual o en alianza. Los comicios se llevarán a cabo en un calendario que ha sido consensuado entre las autoridades electorales de Nicaragua y los partidos políticos participantes. Es decir, Nicaragua vive una situación de normalidad y estabilidad.
¿De qué países o instituciones serán enviados observadores?
Las autoridades correspondientes están organizando las invitaciones que se dirigirán a personalidades expertas en materia electoral de diferentes países, pero debo decirle claramente que la posición de nuestro Gobierno es no invitar a la OEA después de su participación en un golpe de Estado en Bolivia. Nosotros no podemos invitar a alguien que ha participado en la promoción y ejecución de un golpe de Estado contra un país democrático como es el caso de Bolivia.
¿Por qué el presidente Daniel Ortega aspira a un nuevo periodo presidencial?
Es una forma de voluntad popular. La experiencia en Nicaragua nos ha demostrado que cuando ha habido algunos cambios, y eso fue la experiencia de los 16 años anteriores de gobiernos neoliberales, lo que ocurre es el retroceso de las conquistas populares en beneficio de la población y la sumisión en la pobreza, la explotación, la carencia de programas y proyectos que nos beneficien. La población ha experimentado que un gobierno es positivo en la medida que tiene en cuenta a los seres humanos, a los ciudadanos como centro de sus políticas y ese es el caso del Gobierno del presidente Ortega y de la compañera Rosario Murillo. La población concibe que es un buen gobierno, que es su gobierno. Por eso en Nicaragua se habla del “pueblo presidente” (que el presidente es el pueblo). Ese es el elemento que determina, porque la población nicaragüense considera y demanda que el presidente Ortega continúe con un nuevo periodo presidencial para garantizar sus derechos, los derechos que han sido retomados.
Esperamos un triunfo muy exitoso del Frente Sandinista de Liberación Nacional. Hemos hecho un buen gobierno, con políticas económicas y sociales universales, incluyentes y gratuitas encaminadas a lograr el bienestar de nuestra población.
El presidente Daniel Ortega ha criticado a la Iglesia en el país por su actitud opositora mientras que esta institución dice que está trabajando por la paz. ¿Cuál es la fuente del problema entre la Iglesia y el Gobierno, y qué se está haciendo para solucionar esta situación?
Nosotros somos muy respetuosos con las expresiones religiosas: el abanico amplio y multicolor de religiones que hay en Nicaragua. Sin embargo, en el caso de Nicaragua se dio en 2018 un intento de golpe de Estado y, lamentablemente, porque se lamenta que alguien que ocupa un cargo direccional en organizaciones importantes como las religiosas, en lugar de hacer el papel que le corresponde, mezcla la actividad política y lleva a cabo actividades ilegales, ilegítimas y de rompimiento del orden constitucional de un país al intentar dar un golpe de Estado real y práctico.
El presidente Ortega expuso que después de las elecciones, que son el 7 de noviembre de este año, hay que retomar las conversaciones, el diálogo amplio con los diferentes sectores sociales, económico, político e, indudablemente, religioso del país.
¿Qué puede decir sobre la presión que ejerce EEUU a algunos países de Latinoamérica, incluido Nicaragua?
Mantenemos una posición muy clara de rechazo y de condena de esas políticas de injerencia. Definitivamente violentan el derecho internacional, la Carta de la ONU y principios y valores importantísimos para los pueblos del mundo, por ejemplo, los de América Latina y el Caribe, y también el de Turquía. Los Estados y los pueblos tienen el derecho inherente, soberano y digno de definir sus políticas internas e inclusive externas, respetando el derecho internacional y la Carta de la ONU, que es lo que no pasa con EEUU y algunos países europeos que, como imperios que son, siempre realizan acciones de agresión contra los países, buscando incidir en sus políticas internas y retomar vías políticas de dominación y de hegemonismo.
¿Cuál es la posición de Nicaragua con respecto a la extensión de las sanciones por parte de la Unión Europea?
Reitero que para nosotros esas medidas unilaterales, ilegales, arbitrarias, que le llaman sanciones, son la expresión precisamente de potencias que creen que pueden dominar a los demás países y a los demás pueblos. Nosotros hemos dicho muy claramente que rechazamos ese tipo de medidas; no estamos de acuerdo con ellas porque quieren tener una aplicación extraterritorial que realmente no tiene sentido ni justificación. Nos solidarizamos también con otros Estados, con Turquía y otros países de América Latina que sufren realmente este tipo de medidas.
¿Qué medidas está tomando su Gobierno para hacer frente a la migración a gran escala de nicaragüenses a Estados Unidos?
Como usted sabe, hay realmente un fenómeno migratorio de otros países que tiende a ser a veces masivo. En el caso de Nicaragua, no tenemos una migración masiva ni extraordinaria, sino dentro de la escala de lo normal de las migraciones ya tradicionales que se producen en los países de la región centroamericana. Precisamente la migración de Nicaragua ha disminuido en la medida en que nuestras políticas internas tienen como centro a la población y vamos mejorando, avanzando y desarrollando políticas económicas-sociales que le dan a la población seguridad ciudadana, alimentaria, hospitalaria, educativa.
Muchas veces también se utiliza ese tipo de situaciones para tergiversar la realidad y mostrar como si en Nicaragua estuviéramos en una situación altamente preocupante, lo cual no es cierto.
¿Cómo son las relaciones entre Nicaragua y Turquía? ¿Piensa Managua abrir una embajada en suelo turco?
Las relaciones entre Turquía y Nicaragua son relaciones muy buenas y con una comunicación fluida, constructiva y positiva. Hemos estado conversando con el canciller turco Mevlut Cavusoglu y precisamente ayer (13 de octubre) suscribimos acuerdos de cooperación entre nuestros dos países en los campos de la agricultura, educación y consultas políticas. Hemos avanzado también en los acuerdos sobre cooperación mutua de promoción y seguridad de las inversiones en nuestros dos países. Estos acuerdos expresan de forma concreta cómo nuestras relaciones son positivas y avanzan para ampliar y fortalecer la cooperación, los intercambios, las inversiones, las relaciones culturales.
También encontramos que nuestras naciones tienen identidades similares en la política exterior. Establecemos cooperación mutua en organismos internacionales. Sumado a esto, tanto Turquía como Nicaragua fortalecen la defensa del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas, así como también el principio de no injerencia en los asuntos internos de los Estados. Además, practicamos las relaciones internacionales de una forma respetuosa y de igualdad soberana. Estos elementos contribuyen al fortalecimiento de relaciones amistosas, de cooperación y de solidaridad.
Hemos estado conversando con las autoridades de Turquía y dentro de nuestros proyectos y planes se encuentra abrir una embajada de Nicaragua aquí en el país lo más pronto posible.
El sitio web de la Agencia Anadolu contiene sólo una parte de las historias de noticias ofrecidas a los suscriptores en el Sistema de Difusión de AA News (HAS), y en forma resumida.
