Cada vez son más las voces que piden la continuación en el cargo del primer ministro italiano

Cada día son más las figuras políticas y religiosas, como alcaldes y obispos, que piden que se persuada al primer ministro de Italia, Mario Draghi, para que permanezca en su cargo a pesar de la crisis del Gobierno de coalición.

Este miércoles, Draghi se dirigirá al Parlamento después de que el presidente Sergio Mattarella rechazara su renuncia y le pidiera que evaluara la situación política en un discurso ante los legisladores.

La crisis fue provocada por el Movimiento 5 Estrellas, uno de los principales socios del Gobierno de coalición, que decidió retirarse la semana pasada antes de un voto de confianza crucial.

Inmediatamente después, Draghi anunció su dimisión, una medida que podría confirmar o replantearse tras su discurso en el Parlamento y el consecutivo voto de confianza.

Draghi, el miércoles, podría decidir permanecer en el cargo, de lo contrario, Mattarella se vería obligado a convocar elecciones anticipadas para otoño.

Los llamados a que Draghi permanezca en el cargo, en un momento difícil para Italia y Europa, provienen de diferentes actores, dentro y fuera de Italia.

Más de 1.000 alcaldes italianos firmaron una petición en la que citan los problemas cotidianos de los ciudadanos y la necesidad de que Draghi garantice respuestas sólidas en medio de la incertidumbre económica y la agitación política.

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Otros llamados vinieron de asociaciones, empresarios, profesores universitarios y la Iglesia Católica, a través del presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, el arzobispo metropolitano de Bolonia Matteo Maria Zuppi, y el secretario de Estado de la Santa Sede, Pietro Parolin.

Varios líderes europeos también llamaron a Draghi para expresar su apoyo, ya que el primer ministro italiano está visto en el extranjero como un garante de la estabilidad política y la disciplina fiscal para Italia.

Empresarios y emprendedores pidieron a Draghi que se quedara y siguiera adelante con su programa de reformas, crucial para que Italia reciba EUR 200.000 millones en fondos de recuperación europeos.

*Traducido por Daniel Gallego.