Los crímenes violentos se incrementaron en los EEUU por segundo año consecutivo en 2016, pero permanecen en niveles bajos históricos, según cifras del FBI emitidas el lunes.

La tasa de crímenes violentos subió 3,4 % el año pasado, lo cual, según el Departamento de Justicia, es el alza más grande en 25 años.

El departamento mencionó en particular la tasa nacional de homicidios, la cual dijo que subió casi un 8 %, haciendo que el incremento total desde el 2014 sea de casi 20 %.

La cifra incremento en gran medida por un boom en los asesinatos en las ciudades con más de 250.000 personas. El FBI registró casi un 13 % en incrementos anuales en las localidades.

Los casos de violación subieron 3,5 %, el robo 1 %, los asaltos agravados 5 %.

A pesar de todo, el crimen violento disminuyo 18 % desde en 2007, mientras la tasa de asesinatos también bajo 6 % durante ese tiempo.

“Por el bien de todos los estadounidenses, debemos enfrentar y frenar la tasa creciente de crímenes violentos. Y debemos hacerlo juntos”, dijo el fiscal general Jeff Sessions en un comunicado que estuvo acompañado de las nuevas cifras.

Sessions, y el presidente Donald Trump, frecuentemente hacen referencia al incremento en crímenes violentos para justificar su actitud hacia los temas legales, caracterizada por llamados para condenas más fuertes y el incremento en los arrestos.