Según el Asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, H.R. McMaster, el presunto autor del ataque automovilístico a un grupo de personas que protestaban en una manifestación sí puede estar relacionado con terrorismo interno.

El pasado domingo, McMaster le dijo a ABC News que “siempre que se cometa un ataque para incitar miedo en las personas, eso es terrorismo, pues cumple con los términos de su definición”.

“Lo que aquí se ve es a un criminal, una persona que comete un acto criminal contra sus compañeros americanos, un acto criminal que pudo haber sido motivado, y lo veremos en los resultados que arroje la investigación, por su odio e intolerancia”, agregó.

James Alex Fields Jr., de 20 años, fue identificado como el conductor del auto Dodge Charger plateado que se abrió paso en medio de una multitud en Charlottesville, Virginia, el pasado sábado.

Heather Heyer, una asistente legal que participaba en las protestas, murió en el choque, y 20 personas más resultaron heridas.

Fields Jr. fue fotografiado en primera línea en compañía de otros hombres blancos, cuando sostenía un escudo con el emblema, blanco y negro, de uno de los grupos de odio que participaron en la manifestación de supremacía blanca del pasado viernes.

La Liga Antidifamación (ADL) describe a Vanguard America como un “grupo de supremacía de la raza blanca que se opone al multiculturalismo y cree que América es una nación exclusivamente blanca”.

No obstante, el grupo ha negado que Fields sea un miembro.

De acuerdo con la ADL, Vanguard America usa el slogan nazi “Blood and soil” (Sangre y tierra) para idealizar la conexión entre la raza blanca y Estados Unidos.

La noche del pasado viernes, cientos de nacionalistas blancos atravesaron Charlottsville cargados de antorchas tiki y coreando el slogan nazi.

El acto de violencia ha generado rechazo entre el pueblo estadounidense, que se ha pronunciado por medio de marchas en varias ciudades del país, e incluso en otros lugares del mundo, como Londres.

Trump ha recibido duras críticas por no haber condenado explícitamente a los activistas de la supremacía blanca, que, de manera violenta, se enfrentaron contra protestantes en la manifestación de Virginia.

“Él no responsabilizó a los supremacistas blancos por el acto violento”, comentó George Stephanopoulos, del noticiero de la ABC.

“Cuando se trata de terrorismo radical islámico, el presidente dijo que no se puede resolver el problema si no se le llama a las cosas por su nombre. ¿No debería ser igual con el terrorismo interno?”, cuestionó.

Ante las críticas, McMaster afirmó que Trump califica de terrorista “a todo aquel que fuera responsable por fomentar este tipo de intolerancia, odio, racismo y violencia”.

“Creo que el presidente fue muy claro en eso”, concluyó McMaster.