Una vez más, la Asamblea General de Naciones Unidas aprobó una resolución que pide el fin del bloqueo impuesto por Estados Unidos a Cuba.

Tal como se esperaba, la resolución 'Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos contra Cuba' recibió el apoyo de casi todos los miembros. La resolución fue aprobada con 184 votos a favor y solo dos en contra (Estados Unidos e Israel) junto con tres abstenciones (Colombia, Ucrania y Emiratos Árabes Unidos).

Celebrando la aprobación de la resolución, el canciller cubano Bruno Rodríguez escribió en su cuenta de Twitter: “Una vez más, desde Naciones Unidas #ElMundoDiceNo a la agresión y a las políticas fracasadas de EEUU contra Cuba”.

“Es una gran victoria del pueblo cubano, de la justicia y de la verdad”, agregó el alto diplomático.

El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel también acogió los resultados de la votación, afirmando que “son ya 28 años de rechazo mundial al #Bloqueo. Los bloqueadores se quedan sin argumentos. Los solidarios refuerzan su apoyo”.

Desde 1992 se han adelantado 28 votaciones sobre el tema y, en cada una, la comunidad internacional ha expresado su rechazo al bloqueo.

En la votación de 2019, el proyecto de resolución recibió un apoyo abrumador de 187 votos a favor, con solo tres en contra (EEUU, Israel y Brasil) y dos abstenciones (Colombia y Ucrania).

Ver también: Cuba denuncia que las sanciones de Estados Unidos le han causado pérdidas por miles de millones de dólares.

Un daño incalculable

Al presentar el informe que recibe el mismo nombre de la resolución, Rodríguez aseveró que el daño causado por el bloqueo estadounidense a su país no se puede calcular.

“El daño humano del bloqueo es incalculable. La vida de ninguna familia cubana escapa de los efectos de esta inhumana política. Nadie podría afirmar honestamente que no tiene un impacto real en la población”, manifestó el canciller.

De acuerdo con Rodríguez, la antigua administración de Trump “adoptó medidas propias de tiempos de guerra para privarnos de suministros de combustible, persiguió los servicios de salud que prestamos en otros países, incrementó el acoso a las transacciones comerciales y financieras en otros mercados, y se propuso amedrentar con la aplicación del Título III de la Ley Helms-Burton a inversionistas y entidades comerciales extranjeras”, haciendo énfasis en las 243 medidas tomadas por el Gobierno de EEUU entre 2017 y 2021.

El ministro reiteró que el bloqueo es una violación masiva, flagrante y sistemática de los derechos humanos del pueblo cubano.