El odio y la discriminación contra los musulmanes han alcanzado “proporciones epidémicas”, advirtió el miércoles el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.

Guterres describió el aumento vertiginoso de la intolerancia contra los musulmanes como parte de un cambio más amplio a nivel mundial hacia el nacionalismo y el alejamiento de los derechos de las minorías.

“Un resurgimiento de la intolerancia anti-musulmana está ciertamente en línea con otras tendencias angustiosas que estamos viendo a nivel mundial: un resurgimiento del etnonacionalismo, el neonazismo, el estigma y el discurso de odio dirigido a poblaciones vulnerables, incluidos musulmanes, judíos y algunas comunidades cristianas minoritarias”, dijo Guterres en un evento de la ONU por la conmemoración del Día Internacional para Combatir la Islamofobia.

“Las comunidades minoritarias son parte de la riqueza de nuestro tejido cultural y social, sin embargo, vemos no solo formas de discriminación, sino también políticas de asimilación que buscan borrar la identidad cultural y religiosa de las comunidades minoritarias”, agregó.

“Como nos recuerda el Sagrado Corán: las naciones y tribus fueron creadas para conocerse entre sí. La diversidad es una riqueza, no una amenaza”, recordó el jefe de la ONU.​​​​​​​

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El Día Internacional de Lucha contra la Islamofobia, conmemorado por primera vez este año, se produce después del ataque del 15 de marzo de 2019 a dos mezquitas en Christchurch, Nueva Zelanda.

El 15 de marzo de 2019, Brenton Tarrant, un supremacista blanco australiano, asesinó a 51 personas e hirió a 40 más en la Mezquita Al Noor y el Centro Islámico Linwood. El terrorista fue condenado a cadena perpetua en agosto del año pasado sin posibilidad de libertad condicional, en la primera sentencia de este tipo que se dicta en el país insular.

*Daniela Mendoza contribuyó con la redacción de esta nota.