ESTAMBUL

El activista neozelandés Roger Fowler afirma que lo que Israel está haciendo en la Franja de Gaza es “genocidio abierto” y asegura que Israel nunca ha ocultado esta intención suya desde el principio.

El organizador de la Red de Solidaridad Palestina de Nueva Zelanda y apoyador de la Flotilla Internacional de la Libertad para romper el asedio a Gaza, responde a las preguntas de la Agencia Anadolu (AA) en Estambul, a donde vino para mantener conversaciones.

En referencia a los ataques de Israel contra Gaza, Fowler dice que “Esto es definitivamente un genocidio. El régimen israelí no ha ocultado su intención de destruir o desplazar al pueblo palestino, especialmente a los de Gaza. Están haciendo el terrible trabajo de matar a decenas de miles de personas, herir a muchas más y destruir gran parte de ese hermoso país”.

Tras subrayar que la gente debe actuar para detener estos terribles ataques lo antes posible, Fowler expresó su esperanza de que la Flotilla Internacional de la Libertad tenga un gran impacto en este contexto.

Fowler afirmó que “se llevaron a cabo grandes marchas y manifestaciones contra la masacre genocida de Israel en Gaza” y que ellos, con las protestas que organizan cada semana en Nueva Zelanda, están tratando de dejar claro que lo que Israel está haciendo es inaceptable y exigiendo a sus gobiernos a tomar una postura sobre esta cuestión.

Señalando que esta “tragedia” no es un problema de hace unos 4 o 5 meses, Fowler dice que “durante 75 años, el pueblo palestino, especialmente el de Gaza, ha sido tratado muy mal, y el pueblo de Gaza ha sido confinado a ese pequeño pedazo de tierra. Se les niega el acceso a alimentos, medicinas, materiales de construcción y artículos de primera necesidad adecuados”.

Fowler explica que anteriormente había ido tres veces a Gaza con convoyes terrestres para mostrar solidaridad y que había sido testigo personalmente de la mala situación.

Al afirmar que el boicot fue “una acción muy efectiva”, Fowler dice que cree que “tiene un enorme impacto al presionar a las grandes corporaciones para que comprendan que necesitan retirarse de Israel y retirar su apoyo, así como poner fin a lo que el gobierno israelí y nuestros propios gobiernos están haciendo”.

Al señalar la importancia del boicot, el aislamiento y las sanciones, Fowler enfatiza que el nivel de influencia aumentará si estos movimientos se vuelven tan fuertes que no puedan ser ignorados en todo el mundo y convertirse en un movimiento internacional.

Fowler dice que incluso la “decisión sobre genocidio” de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) fue ineficaz debido a la arrogancia de los gobernantes de Israel, y que todos los estados deberían insistir y presionar para que se cumplan estas decisiones.

Al afirmar que el personal de las Naciones Unidas (ONU) está tratando de hacer lo mejor que puede, Fowler dice que “la última vez que estuve en Gaza me reuní con el personal de la ONU. Tienen muy buenos programas de apoyo y misiones de ayuda, pero carecen de recursos”.

“Esto es absolutamente trágico y desgarrador. Las mujeres, los niños y las familias no tienen comida. Están intentando beber agua de los charcos. La gente come hierba. Ésta es una situación muy desesperada. Realmente lo siento por ellos. Nadie habla de niños. Miles de personas se encuentran bajo los escombros, pequeños bebés y niños. La única manera de cambiar esto es que la gente de todo el mundo se una y presione a las autoridades para detener este genocidio y responsabilizar a Israel”.

*Traducido por Daniel Gallego.