El presidente palestino Mahmud Abbas condenó el lunes la decisión del partido gobernante de Israel de anexar asentamientos judíos en la ocupada Cisjordania. Abbas dijo en un comunicado emitido desde su oficina que Israel quiere "terminar con la presencia palestina de la tierra histórica de Palestina".

"La decisión es una agresión brutal contra el pueblo palestino, la tierra y los lugares sagrados", agregó.

El comité central del partido Likud aprobó una propuesta el domingo que permite la construcción de asentamientos judíos en los territorios palestinos en Cisjordania.

El primer ministro Benjamín Netanyahu aún no ha comentado sobre el tema.

Abbas agregó que Israel no asumiría esta movida "peligrosa" sin el apoyo de la administración de EEUU.

Si la propuesta se presenta al parlamento israelí Knesset, debe discutirse en tres sesiones diferentes antes de ser aprobada.

Israel quiere elevar el número de colonos en Cisjordania a un millón en un corto período de tiempo, mientras que medio millón de residentes viven actualmente en asentamientos judíos en suelo palestino y 220.000 en los asentamientos en Jerusalén Este.

De acuerdo con el derecho internacional, todos los asentamientos judíos en estas regiones son "ilegales".

*María Paula Triviño contribuyó con la redacción de esta nota.