Este 20 de octubre se celebraron las elecciones federales en Suiza. Una de las novedades que resultó de esta jornada fue la fuerte representación que ganó el partido ecológico de Los Verdes, que antes era un partido minoritario. Pasó de tener 11 escaños a 28 con estas elecciones. Pero algo que también vale la pena resaltar es que ahora el parlamento de la confederación helvética estará compuesto en un 42% por mujeres.

Este es el índice más alto de representación femenina en el Parlamento en la historia del país. Se podría pensar, que al ser uno de los países más desarrollados del mundo, un resultado de este tipo no sería tan sorprendente, pero sí resulta curioso teniendo en cuenta que Suiza fue uno de los últimos países en permitir que la mujer pudiera votar en 1971.

Con este 42% de representación femenina, 20 mujeres más ocuparán escaños con respecto a la legislatura anterior. Si bien esto es un gran avance para el feminismo en el país, también resultó en un gran contraste, teniendo en cuenta que tan solo unos meses atrás, en junio, miles de mujeres suizas se tomaron las calles del país exigiendo un alto a la violencia de género y mayor igualdad de oportunidades.

La lucha por la defensa de los derechos femeninos en Suiza ha sido larga y continúa (al igual que en todos los países), y es que las manifestantes que se tomaron las calles en junio, lo hicieron recreando un evento similar ocurrido hace 28 años, cuando las mujeres bloquearon los tranvías de Zúrich y con globos y pancartas morados exigieron un salario equitativo en los mismos trabajos que compartían junto a los hombres.

A pesar del alto nivel de desarrollo, las mujeres en junio aseguraron que su país aún debe avanzar mucho más en cuanto a remuneración femenina e igualdad de género en sus lugares de trabajo.

Además de la fuerte manifestación de 1991 que marcó un precedente para el movimiento feminista suizo, también es importante recordar que no fue sino hasta febrero de ese 1971 que el país permitió a nivel nacional el sufragio para las mujeres.

En vista de que el sistema por el que se rige Suiza es una democracia directa, la decisión de otorgarle el voto a las mujeres dependía de un referéndum votado por hombres. Un primer referendo celebrado en 1959 dejó sin derecho a voto a las mujeres por una década más. Una década en la que las mujeres se vieron forzadas a salir a las calles y exigir un cambio que llegó con el referéndum de 1971.

Con los recientes acontecimientos electorales, Suiza entraría al top 10 de los países con más representación femenina en sus parlamentos, después de Ruanda que se encuentra en primer lugar con un 61,3%; Cuba con un 53,2%; Bolivia con un 53,1%, siendo estos tres los únicos países en los que las mujeres superan a los hombres en cantidad de escaños en sus respectivos parlamentos, sin contar otros como México, Suecia, Finlandia y Francia, con menos representación femenina, pero con la importante cuota que merece el género.