ESTAMBUL

La economía japonesa se contrajo un 0,2% en el primer trimestre de 2025, marcando su primera contracción trimestral en un año, según datos preliminares publicados este viernes.

La cifra superó las expectativas del mercado de una caída del 0,1%, lo que refleja la debilidad de las exportaciones y la persistencia de dificultades a nivel mundial.

Las exportaciones cayeron un 0,6% durante el trimestre, restando 0,8 puntos porcentuales al producto interior bruto. En contraste, la demanda interna creció un 0,6%, contribuyendo con 0,7 puntos porcentuales al PIB.

En términos anuales, la economía se contrajo un 0,7%, muy por encima de las previsiones de los analistas de una caída del 0,2%.

La contracción se produjo tras la decisión del Banco de Japón, el 1 de mayo, de mantener estable su tipo de interés oficial en el 0,5%.

“Se esperan shocks negativos de demanda, incluyendo el impacto de la mayor incertidumbre sobre la inversión fija de las empresas y el consumo de los hogares, una disminución del volumen de las exportaciones a Estados Unidos y un deterioro de la rentabilidad de las exportaciones de Japón”, declaró el banco central y añadió que la política arancelaria estadounidense seguiría presionando a la baja la actividad económica y los precios de Japón.

Mientras tanto, Japón ha ampliado su sistema de autorización de seguridad para abarcar sectores considerados económicamente sensibles como los semiconductores avanzados y la infraestructura crítica, designándolos como "clasificados", según informó Kyodo News.

Con el nuevo sistema, los funcionarios gubernamentales y los empleados del sector privado involucrados en dichos sectores se someterán a verificaciones de antecedentes por parte de la Oficina del Gabinete.

La defensa, la diplomacia, el espionaje y la lucha contra el terrorismo ya están regulados por una ley independiente que regula los secretos de Estado.

*Traducido por Daniel Gallego.