El Banco Central de Nicaragua (BCN) asociado con el Instituto Nacional de Información de Desarrollo (INIDE), señaló que la tasa de desempleo en el país es del 4%, mientras que los ciudadanos reciben el informe con escepticismo, pues gran parte de la población emigra a los países del norte en búsqueda de trabajo.

Nicaragua es el segundo país más pobre del hemisferio occidental.

Según el BCN la población laboral alcanzó el 96% en el tercer trimestre del 2017, traducido en un crecimiento del 1,7% frente al mismo periodo del 2016. También indicó que la tasa neta de ocupación para las mujeres es de 95.8% y para los hombres de 96.4%.

Por otra parte, el subempleo -índice para los que trabajan medio tiempo-, fue reportado en 42,6%, lo que representa una reducción de 3,9% con relación al primer trimestre del año pasado. Desde septiembre del 2012 el Gobierno de Daniel Ortega no publica la base de datos de la Encuesta Continua de Hogares, que permitiría conocer trimestralmente los indicadores de empleo en Nicaragua.

Las cifras publicadas por el BCN no concuerdan con los números divulgados por el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) en julio del 2017, donde aseguran que tienen afiliados a 919.770 trabajadores (15,3%), en un país de 6 millones de habitantes.

Los analistas advierten que las cifras no son reales pues solo en Costa Rica hay 300.000 nicaragüenses que no consiguieron trabajo en su país. Esto sin contar a los que partieron a España o Estados Unidos.