ESTAMBUL

El ministro de Asuntos Exteriores belga, Maxime Prevot, reiteró este miércoles las preocupaciones de su país respecto al plan de la UE de prestar a Ucrania los beneficios de los activos rusos congelados, subrayando que no se están abordando "de manera satisfactoria".

"Tenemos la frustrante sensación de no haber sido escuchados; nuestras preocupaciones están siendo minimizadas. El texto que la Comisión presentará hoy no aborda nuestras preocupaciones de manera satisfactoria", declaró Prevot a la prensa antes de la reunión de ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN en Bruselas.

Reafirmó que habían considerado "repetidamente" la opción de un préstamo para reparaciones "como la peor de todas", por ser "arriesgada". "No es aceptable utilizar el dinero y dejarnos solos afrontando los riesgos", subrayó Prevot. Además, exigió que se cubran por completo los riesgos que enfrenta Bélgica como resultado del plan.

La semana pasada, el primer ministro belga, Bart De Wever, también afirmó en una carta enviada a la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, que el plan propuesto es "fundamentalmente defectuoso" y violaría el derecho internacional.

En la carta, el primer ministro belga también advirtió sobre posibles represalias rusas, especialmente dirigidas a Euroclear y Bélgica, y enfatizó que los activos congelados podrían desempeñar un papel en futuras negociaciones de paz y que su uso ahora podría complicar dichas conversaciones.

Por otra parte, Euroclear, la entidad de valores con sede en Bruselas, y el Banco Nacional de Bélgica también enviaron cartas separadas a la UE, advirtiendo a sus líderes sobre los riesgos legales y financieros del plan.

Las declaraciones se produjeron en medio de conversaciones sobre la intención de la UE de movilizar los activos estatales rusos congelados, la mayoría de los cuales se encuentran en Euroclear, para recaudar alrededor de 140 000 millones de euros (más de 161 000 millones de dólares) para un préstamo a Ucrania.

*Traducido por Daniel Gallego.