Cultura

Nidia Góngora vuelve al Petronio Álvarez con su reinvención de la música del Pacífico colombiano

Con ocasión del inicio del Festival de Música del Pacífico Petronio Álvarez en Cali, Colombia, la cantora de Santa Bárbara de Timbiquí habla sobre cómo la música autóctona se reinventa en un cruce transatlántico.

Santiago Serna Duque  | 14.08.2019 - Actualızacıón : 16.08.2019
Nidia Góngora vuelve al Petronio Álvarez con su reinvención de la música del Pacífico colombiano Nidia Góngora, cantora de Santa Bárbara de Timbiquí, quien se presentará en el Mestizo, evento del British Council en el marco del Festival Petronio Álvarez. (Cortesía British Council)

BOGOTÁ, Colombia

Por: Santiago Serna Duque

Antes de la segunda edición del Mestizo, evento que el British Council realizará este jueves en el marco del Festival de Música del Pacífico Petronio Álvarez en Cali, Colombia, la Agencia Anadolu habló con Nidia Góngora, la cantora que lleva la memoria ancestral de esta zona del país por el mundo. 

Góngora construye un espectro sonoro nutrido por marimbas y cununos que, acompañado por los beats electrónicos del DJ inglés William Holland (Quantic), universalizó la escena musical del suroccidente colombiano. 

Esta es una corta charla sobre cómo la música se reinventa en un cruce transatlántico. 

Segunda vez en un Mestizo. ¿Por qué es importante el diálogo entre la música tradicional colombiana y la británica?

Es importante realizar estos encuentros interculturales porque la música, desde su sentido universal, sirve para unir y romper barreras, sirve para hablar de lo que ocurre en diferentes comunidades y, a su vez, sirve como un espacio de hermandad y visibilización de nuestra cultura. 

Este evento también permite llevar mensajes que llamen a la reconciliación y a la unidad de los pueblos, sin importar el lugar donde estemos, sin importar la raza, sin importar la política, sin importar la religión, sin importar el color de la piel. A través de la música y el arte nos unimos como seres humanos. 

¿Esa hermandad de la que habla se representa en su colaboración artística con el inglés William Holland (Quantic)? 

El arte une, el arte simboliza cosas positivas. Como dije, el arte rompe fronteras. En ese sentido, mi colaboración con Will me ha ayudado a crecer desde lo profesional y lo personal. Indudablemente me abrió puertas a mí y a la música del Pacífico. 

Hemos llevado por el mundo la unión entre dos culturas. Yo aplaudo esta camaradería y complicidad. La verdad me siento muy afortunada de trabajar con alguien como Will, porque puedo contar con un gran músico y amigo. 

Tras su trabajo con Quantic, ¿cree que al mezclar sonidos folclóricos con electrónica se hace más viable la comercialización de la música colombiana? 

Yo creo que la acogida de nuestra música, y en particular la del Pacífico, tiene que ver más con su sonoridad y contenido espiritual. Ese contenido que guarda toca fibras muy profundas del ser humano. Te diría que alcanza a sensibilizar de manera contundente a las personas. 

Al mezclar elementos tan universales y comerciales como la electrónica, combinados con nuestros sonidos, todo se convierte en un arma -en el buen sentido de la palabra- de doble impacto. 

¿Ese impacto está relacionado con generar preguntas? 

Sí, despierta curiosidad en los espectadores. Se preguntan muchas veces de dónde vienen los sonidos de la marimba y esos cantos cargados de “ancestralidad”, de mística. Estos espacios (como el Festival Glastonbury en Reino Unido) han sido una oportunidad muy efectiva para atraer a otro público y decirle: "mirá, esto viene de la región Pacífica colombiana". Es un instrumento para presentar nuestra diversidad.

Mucho se habla de su aporte a los sonidos modernos. ¿Qué ha absorbido de la electrónica?

Como cantoras tenemos que preservar lo que más se pueda la tradición del Pacífico. Eso siempre lo hemos hecho. Pero, por otro lado, en mi proyecto con Quantic he adquirido elementos desconocidos para vincularlos a mi trabajo. 

Cuando nosotros hablamos de música tradicional y autóctona del Pacífico, debemos saber que existe una estructura base que la rige: marimbas, cununos, bombos y guasás. Son los instrumentos que hablan de los colores y la memoria del pueblo negro. Esto, vinculado a la electrónica, me aporta para abrir el espectro musical. 

Hay una Nidia mucho más rica en términos de experticias musicales tras la colaboración con diferentes proyectos. Hay una Nidia mucho más segura y abierta a los sonidos desconocidos. Eso es determinante porque a uno desde la tradición le enseñan a ser muy cerrado, por la misma tarea de preservar.

El sitio web de la Agencia Anadolu contiene sólo una parte de las historias de noticias ofrecidas a los suscriptores en el Sistema de Difusión de AA News (HAS), y en forma resumida.