Por: Santiago Serna Duque 

La cuarta temporada de la serie Narcos, producida por Netflix, se estrenó a nivel mundial el pasado 16 de noviembre. Protagonizada por Diego Luna y Michael Peña, indaga en los orígenes de los carteles del narcotráfico mexicano y presenta a una figura desconocida en la cultura popular latinoamericana: Miguel Ángel Félix Gallardo, el hombre que unificó a los traficantes de cocaína y fundó un imperio de droga en la nación norteamericana.

En el ADN de la producción de Netflix está presente el realizador de cine colombiano Andi Baiz.

Baiz ha trabajado como director y productor en todas las temporadas y jugó un papel cardinal para que Narcos ya sea considerada por críticos y fanáticos como una serie de culto.

La Agencia Anadolu habló con Baiz desde México, donde ahora vive. 

La crítica sugiere que los patrones del género gángster pueden ser repetitivos y más para una serie que va en su cuarta temporada. ¿Cómo hacer para que Narcos no caiga en una especie de 'remake' de Caracortada o Carlitos Way, pero filmada en México?

Bueno, obviamente en la historia del crimen siempre encontramos similitudes, pero como hablamos de personajes que existieron en la vida real tenemos que encontrar los detalles particulares que los diferencian de tipos como Tony Montana o Carlito Brigante.

En esta búsqueda nos ayuda que, para Narcos cuatro, siempre contamos con directores de cine y no de televisión. Trabajamos con Amat Escalante (Premio a Mejor Director en el Festival de Cannes), Alonso Ruizpalacios (Güeros) o Fernando Coimbra (El lobo detrás de la puerta), ellos -y me incluyo- no graban con los visos que deja la TV y siempre están buscando maneras diferentes de narrar. Cada plano es estudiado y pretende ser perfecto, hay una tendencia al perfeccionismo. Eso hace que, quizás, nos alejemos de las repeticiones. Aunque no siempre pasa. 

Narcos cuatro tiene referencias, en su narración y montaje, de películas como Goodfellas de Martin Scorsese…

Los que estamos detrás de este proyecto (escritores, directores, productores…), tenemos una cultura cinematográfica supremamente amplia. La verdad, somos un grupo de gente que devoramos cine y el género gángster, con sus películas icónicas, siempre serán una referencia. Y no te estoy hablando solo de 'Buenos Muchachos', sino de muchísimas otras. Este trabajo contiene mucho de ese género, pero en ningún momento buscamos hacerle algún tipo de homenaje al cine del hampa. 

Los que sí es cierto es que antes de realizar esta serie vimos muchas cintas de gangsters. Desde su origen en los años veinte y los treinta, con figuras como James Cagney y producciones como la Caracortada (1932) de Howard Hawks, pasando por El Padrino (1972) hasta Los Intocables (1987). 

En ese sentido, creo que Narcos se volverá un referente para las futuras generaciones de realizadores y cinéfilos, como lo fueron estas películas para nosotros. Narcos, a través de su visión moderna y el tiempo, ayudará a que avance el género y eso me parece lindo. 

Muchos no entienden qué significa ser el coproductor ejecutivo en una serie como Narcos. ¿Cuál es su rol?

Esa respuesta tiene dos partes. Lo que yo hago específicamente como productor es encargarme de tomar decisiones creativas sobre la serie. Por ejemplo: decido cuáles son las locaciones y soy parte importante en la selección de los actores para los papeles pequeños y grandes. 

Estoy involucrado con el departamento de arte, también hago notas para cambiar algunas cosas del guión y, a su vez, apoyo a los demás directores en diferentes capítulos de la temporada.

No me meto con cosas del presupuesto, simplemente intervengo en el 'look' del show como la fotografía, el arte y el casting.

La segunda parte de la respuesta tiene que ver con el crédito del productor ejecutivo que, por lo general, es uno de los más relevantes en una serie. 

Eso varía mucho en el mundo del entretenimiento. Es decir, a ti te pueden dar un crédito por hacer una llamada telefónica que impulse el proyecto, por invertir dinero o por otras razones que nada tienen que ver con lo creativo y con toma de decisiones importantes. 

En esto hay mucha gente que lleva créditos de productor pero que no hacen nada. Por lo mismo, no hay una definición exacta de lo que hace un productor ejecutivo en el cine o en una serie. En mi caso es diferente porque estoy involucrado en la toma de decisiones de principio a fin. 

Hablando del trabajo del productor, ¿qué pensó cuando supo que habían asesinado en México a Carlos Muñoz Portal mientras buscaba locaciones para Narcos cuatro?

Yo no lo conocía porque cuando eso ocurrió nosotros estábamos realizando la tercera temporada en Colombia. La muerte de Carlos Muñoz pasó en una etapa de predesarrollo, en un periodo preliminar al rodaje en el que ni siquiera había guiones escritos. 

En ese contexto te puedo decir que aunque no lo conocí me dio duro porque era un colega. Pero también pensé que ese asesinato no estaba relacionado con la serie. Fue un hecho fortuito. Él desafortunadamente estaba con una cámara en el lugar equivocado y unos criminales desconfiaron de su presencia. La muerte de Carlos hace parte de la violencia que azota a México y que la serie, en ese momento, no puedo evadir. 

¿Por qué Netflix marcó un antes y un después en su vida?

Netflix cambió mi vida porque cuando empezamos con la primera temporada en Colombia nunca creímos que llegaría a ser tan icónica, importante y exitosa. 

Cuando esto empezó, Eric Newman, el Showrunner de Narcos, confió en mí y me dio todas las herramientas para crear y dirigir. Por medio de este impulso y con un presupuesto más holgado en comparación con el que había trabajado en otras producciones, pude dirigir cuatro episodios en cada temporada, lo que es básicamente cómo grabar dos películas por año. 

Esto, aunado a la posibilidad de trabajar con profesionales tan altamente calificados, me puso en el mapa y permitió que hoy pueda sentirme mucho mejor director que hace cinco años. 

Ha estudiado a fondo la vida de Miguel Ángel Félix Gallardo, el protagonista de Narcos México, ¿en qué se diferencia él de otros narcotraficantes mexicanos como 'El Chapo' Guzmán o Amado Carrillo?

La diferencia es que Félix Gallardo entendió la importancia de agrupar a todos los mafiosos de México, para crear una suerte de monopolio del narcotráfico. Antes de él había desorganización en la mafia mexicana y Miguel Ángel Félix Gallardo brindó orden y unión a una maquinaria criminal que marchó como un relojito porque todos trabajaban por un mismo fin. 

Además, fue quien generó el vínculo con los carteles colombianos y esto le permitió a esta organización delictiva trabajar con cocaína. Antes, el narcotráfico en México -previo a Félix Gallardo- funcionaba con base en la heroína y la marihuana. 

Pese a que estas acciones son reprochables él tuvo una visión que lo hizo diferente. Hay que tener en cuenta que cuando dejó el poder también regresó el caos y el crimen desaforado entre las plazas narcotraficantes en México. 

¿Y Diego Luna, con su cara de niño, es el actor ideal para encarnar al llamado 'Padrino' mexicano?

Sin duda, Eric Newman fue el que llegó a Diego Luna y atinó completamente. Luna es un actorazo. Justamente él, Wagner Moura (Pablo Escobar) y Alberto Ammann (Pacho Herrera) son los mejores actores con los que yo he trabajado. 

¿Cuál es la característica que separa a los carteles mexicanos de los colombianos, más allá de que nosotros producimos la cocaína y ellos la distribuyen?

No te puedo decir una diferencia clara entre los carteles colombianos y mexicanos. 

Pero, por otro lado, hay un tema bien complejo. Aunque en Colombia la corrupción es una fuerza demoledora, siempre hubo un sector de la población civil, de las autoridades y de la política, que trataron de luchar contra el narcotráfico. Por más podrido que todo estuviera siempre hubo gente que se enfrentaba a ese monstruo en nuestro país. 

En México es distinto. Estudiando la historia del narcotráfico en este país desde los años cuarenta, puedo decir que aquí las autoridades y el narcotráfico son uno solo. El nivel de corrupción es mucho mayor. Ese cáncer está en el ADN estatal mexicano y el uno no puede vivir sin el otro. 

Usted dirigió Satanás, Roa y 12 capítulos de Narcos. ¿Tiene alguna fijación por contar historias de asesinos?

Si analizas mis obras te das cuenta que sí, pero honestamente no soy consciente de eso. Hay algo que me interesa de la naturaleza humana propia del villano y no del héroe. Me gusta indagar en los límites de personas que toman la decisión de matar, siento curiosidad por ese tipo de personajes. Ese: “dónde trazamos la línea” es el origen para muchas de mis películas.

¿Si fuera a crear un personaje para una película mezclando las características de narcos reales cómo sería? 

Debería tener tradiciones, humanidad e idiosincrasia. Ese personaje contaría con el amor de la familia que tenía Pablo Escobar, el maquiavelismo de Félix Gallardo y la pasión de Rafa Caro Quintero. 

¿La quinta y sexta temporada de Narcos contarán las historias de Amado Carrillo y ‘El Chapo’ Guzmán?

Por ahora trabajamos en la quinta temporada de Narcos. Continuaremos con la historia de Miguel Ángel Félix Gallardo a finales de los años ochenta. Aún no se aprobó una sexta temporada.