Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Los hombres bordadores durante la elaboración del ‘El sueño: el diario del León’, un libro en tela y bordado a mano por 17 hombres privados de la libertad que se encuentran a la espera de sentencia en la Unidad de Reacción de Inmediata (URI) en Bogotá, Colombia, septiembre 13, 2019. Este es proyecto, pionero en Colombia, que recoge la historia de Daniel León y la tragedia que desembocó en un drama familiar que lo llevó a prisión, recoge la catarsis y la necesidad de pedir perdón. Las páginas bordadas siguen la historia del León, un animal que llega a la selva, que es la metáfora de la cárcel, donde cohabita con otros animales. Para lograr bordar la historia se han requerido 6.936 horas de trabajo, más de 1.700 puntadas por hora, 320 dedos pinchados; 240 agujas partidas y dobladas; cerca de 10 kilómetros de hilo mouliné y perlé entretejido y ocho kilómetros de desbaratado, lo que quiere decir que han tenido de deshacer el bordado y volver a empezar. Pero más que hilos y agujas, estos hombres han requerido de toneladas de fuerza de voluntad para seguir, en un ejercicio profundo de autocontrol y paciencia, para encontrar a las personas adecuadas que fueran capaces de crear una disciplina diaria y que lograran pasar la página de su vida para ser reconocidos por un buen acto.
Tendencias
Últimas Noticias
Desafiando estigmas: El primer funcionario público con Síndrome de Down de Bogotá, en conmemoración del Día Mundial de esta condición.
Una familia rescatada de los escombros 133 horas después de que los terremotos azotaron Kahramanmaras
El presidente de Turkiye, Recep Tayyip Erdogan, visitó la ciudad de Sanliurfa, una de las afectadas por los terremotos