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Se cumplen diez años de la Primavera Árabe: ¿Cuál es el balance?

El movimiento, que comenzó hace 10 años en Túnez y en varios países de Oriente Medio y del norte de África, se ha convertido prácticamente en un “invierno árabe” debido a los diferentes "golpes de Estado, guerras e intervenciones extranjeras".

Enes Canlı  | 15.01.2021 - Actualızacıón : 16.01.2021
Se cumplen diez años de la Primavera Árabe: ¿Cuál es el balance? Las principales calles y avenidas permanecen casi vacías debido a las restricciones por la pandemia de coronavirus, en medio de la conmemoración del décimo aniversario de la revolución tunecina, llamada 'Primavera Árabe' en Túnez, el 14 de enero de 2021.(Yassine Gaidi - Agencia Anadolu)

Ankara

Por: Enes Canlı

El derrocamiento del dictador tunecino Zine El Abidine Ben Ali, quien gobernó Túnez durante más de dos décadas, gracias a las multitudinarias manifestaciones públicas del 14 de enero de 2011 en el país, -que marcaron el inicio de los movimientos revolucionarios conocidos como la Primavera Árabe-, abrió una página completamente nueva, no solo para ese territorio del norte de África, sino para toda la geografía árabe.

A pesar de todas las dificultades experimentadas durante el periodo de transición política, Túnez ha logrado preservar los derechos personales de sus ciudadanos, sus libertades y democracia, pero después de 10 años de la denominada Primavera Árabe, el país está bajo una sombra de descontento socioeconómico, debido a que su Gobierno no ha logrado materializar las expectativas económicas de la revolución.

En otros países en donde estallaron levantamientos populares durante la Primavera Árabe, a diferencia de Túnez, no se logró garantizar las libertades anheladas por la revolución debido a gobiernos más autoritarios; también se vivieron graves problemas económicos, hambrunas, epidemias y guerras civiles.

La Agencia Anadolu preparó un balance de lo sucedido en los países que tocó la primavera árabe.

Túnez: 14 de enero de 2011

Los tunecinos salieron a las calles en masa después de que un joven llamado Mohamed Bouazizi se inmolara al prenderse fuego a sí mismo el 17 de diciembre de 2010, como protesta a la incautación de su carro que utilizaba para realizar ventas ambulantes y por los malos tratos que sufrió por parte de las autoridades.

Las protestas que siguieron a la inmolación de Bouazazi dieron nacimiento a la Primavera Árabe y Zine El Abidine Ben Ali, el dictador que había gobernado Túnez durante 24 años, tuvo que escapar del país con su familia el 14 de enero de 2011.

A pesar del difícil proceso de transición, Túnez logró que el poder se transfiriera sistemáticamente mediante elecciones democráticas.

Aunque Túnez, la cuna de la Primavera Árabe, ofreció a sus ciudadanos muchos beneficios en términos de derechos y libertades fundamentales, la revolución no cumplió con las expectativas económicas. Los problemas socioeconómicos se agravaron por la pandemia de coronavirus (COVID-19), algo que plantea una mayor amenaza para los logros de la revolución tunecina.

Egipto: 25 de enero de 2011

Los movimientos populares a favor de la democracia comenzaron el 25 de enero de 2011 en Egipto. El país del Nilo fue el segundo en donde se vivieron levantamientos de la Primavera Árabe. A pesar de que las manifestaciones llevaron al derrocamiento del expresidente Hosni Mubarak, (el 11 de febrero de 2011, tan solo tres semanas después de que iniciaron las protestas) quien duró en el poder 30 años, el periodo de transición terminó con un golpe militar.

En 2012 el país eligió por primera vez en su historia a un presidente de manera democrática, Mohamed Morsi. Sin embargo, el 3 de julio de 2013 fue derrocado mediante un golpe militar encabezado por Abdelfatah al-Sisi, quien desde ese entonces ostenta el cargo de presidente en Egipto.
Morsi fue encarcelado tras el golpe y murió el 17 de junio de 2019 en una prisión del Cairo, la capital egipcia.
En Egipto el Ejército ha aumentado aún más su dominio sobre la política, la economía y la sociedad civil, y está hoy gobernado bajo más presión y lejos de la prosperidad que tenía bajo la atmósfera antidemocrática de incluso la de la era de Mubarak.

Durante el golpe de Estado cientos de egipcios murieron, se realizaron numerosos arrestos y órdenes de ejecución. El Ejército llevó a cabo una campaña opresiva contra la oposición, aumentando su influencia en la política. El país se ha empobrecido gradualmente y también se ha visto el surgimiento de actos terroristas en los últimos años.

Yemen: 27 de enero de 2011

El levantamiento popular dio paso a la salida del entonces presidente de Yemen, Alí Abdalá Salé, quien gobernó desde 1978 hasta el 27 de enero de 2011. Tras la retirada de Salé, su adjunto, Abd Rabbuh Mansur al-Hadi se postuló como único candidato a las presidenciales y desde el 21 de febrero de 2012 hasta la fecha, ha ejercido como presidente del país.

Sin embargo, debido a la inestabilidad en Yemen en materia de seguridad, organizaciones como Al Qaeda encontraron espacio para sus actividades en el país. Los rebeldes hutíes, que aprovecharon el vacío de la administración, avanzaron hacia la capital, Saná, y dieron un golpe de Estado al Gobierno.

El golpe de Estado de parte de rebeldes hutíes contra el Gobierno yemení abrió paso a la intervención militar de parte de una coalición liderada por Arabia Saudita el 26 de marzo de 2015, arrastrando al país a una violenta guerra civil que continúa hasta la fecha.

El cólera, causado por la falta de servicios básicos como agua potable, alimentos y salud en el país, ha costado la vida a cientos de yemeníes. Mientras que epidemias de otras enfermedades continúan amenazando la vida de millones de personas que cayeron en el desplazamiento.

La situación en Yemen debido a la guerra civil, la pobreza, el hambre y las enfermedades, es calificado por las Naciones Unidas como "el mayor desastre humanitario del mundo" en la actualidad.

Baréin: 14 de febrero de 2011

Los disturbios contra la monarquía de Baréin, un país de mayoría chií pero gobernado por una monarquía sunita, el 14 de febrero de 2011, encontraron una dura intervención de parte del Gobierno.

Como resultado de las violentas intervenciones contra los manifestantes, se registró un alto número de muertos, heridos y detenciones; algo que llevó a un aumentó en la participación en las movilizaciones. Cuando la administración no pudo reprimirlas, el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) decidió intervenir en las protestas en Baréin el 14 de marzo de 2011 con una fuerza militar conjunta.

Las manifestaciones fueron reprimidas tras intervención militar liderada por Arabia Saudita, pero esta situación provocó el rechazo de Irán, un país que siguió de cerca los acontecimientos.

El rey de Baréin, Hamad bin Isa Al Jalifa, trató de satisfacer las demandas del público haciendo cambios en la constitución del país en mayo de 2012. Sin embargo, hasta la fecha continúa la presión de la administración de Baréin contra los grupos de oposición en el país.

Libia: 17 de febrero de 2011

Manifestaciones en contra del régimen libio de Muamar al Gadafi, quien estuvo en el poder durante 42 años, se convirtieron en enfrentamientos que dieron paso a una guerra civil en el país y la intervención de fuerzas extranjeras, incluyendo a la OTAN.

Gadafi fue asesinado en la ciudad de Sirte el 20 de octubre de 2011 en un ataque conjunto entre la OTAN y el Consejo Nacional de Transición (CNT).

La turbulenta situación en el país se superó parcialmente con las elecciones del 7 de julio de 2012. Sin embargo, el comandante golpista Jalifa Haftar, líder de las fuerzas armadas ilegítimas en el este del país, intentó ampliar la zona que controlaba aprovechando el vacío de la administración.

Haftar, socavando muchas iniciativas políticas internacionales y los esfuerzos de diálogo lanzados para resolver la inestabilidad en Libia, arrastró al país, rico en petróleo, a una espiral de violencia tras ordenar a sus milicias a capturar la capital del país (Trípoli) en abril de 2019 con apoyo militar, político y financiero.

El Gobierno legítimo de Libia, reconocido por la ONU, firmó un acuerdo de delimitación marítima, cooperación militar y de seguridad con Turquía en noviembre de 2019.

Gracias al apoyo de Turquía, en la primera mitad de 2020 el Gobierno legítimo libio logró expulsar a las tropas de Haftar al oeste del país. Aún continúan las negociaciones para llegar a una solución política a la crisis del país, bajo mediación de la ONU.

Siria: 15 de marzo de 2011

Una serie de protestas pacíficas a favor de la democracia que comenzaron en la ciudad de Dera, en Siria, el 15 de marzo de 2011, fueron reemplazadas por una sangrienta guerra civil tras la intervención del régimen de Bashar al-Asad, quien se ha aferrado al poder indefinidamente en el país.

Cientos de miles de civiles han sido masacrados en la guerra civil, la mayoría de los cuales fueron perpetrados por el régimen de al-Asad y sus aliados, mientras que millones de sirios quedaron desplazados y se han convertido en refugiados.

Siria se ha convertido en un área de enfrentamiento militar para las potencias internacionales y los conflictos continúan. La guerra en Siria ha sido además un elemento de inestabilidad para la región y los países vecinos.

*Camilo Hernández contribuyó a la redacción de esta nota.

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