El Gobierno iraquí informó este jueves que unas 560 personas murieron en las masivas protestas que iniciaron en octubre del año pasado contra el Gobierno dirigido por Adel Abdul-Mahdi.

"El recuento de muertos desde el estallido de las protestas en octubre ha llegado a casi 560, incluidos civiles y militares (...) Las manifestaciones fueron acompañadas de violencia injustificada contra los manifestantes", aseveró Hisham Dawood, asesor del primer ministro iraquí, Mustafa al- Kadhimi, en una rueda de prensa.

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Dawood resaltó que el Gobierno iraquí formó un comité de investigación para revelar quiénes fueron los perpetradores y los involucrados en la violencia contra los manifestantes.

El funcionario también agregó que la administración trata de poner fin a los casos de secuestro y las desapariciones forzadas, haciendo hincapié en que el objetivo del Gobierno es "un prestigioso estado de derecho".

Sin embargo, el asesor no se refirió al número de personas heridas durante las manifestaciones.

Desde principios de octubre la nación fue sacudida por una serie de masivas manifestaciones contra las malas condiciones de vida y la corrupción, lo que obligó al primer ministro, Adil Abdul-Mahdi, a renunciar.

A pesar de la caída del Gobierno de Abdul-Mahdi, Irak todavía registra protestas masivas para presionar al Gobierno de Al-Kadhimi para que cumpla con sus compromisos, mejore los servicios públicos, ponga fin a la corrupción y enjuicie a los involucrados en el asesinato de manifestantes.

*Juan Felipe Vélez Rojas contribuyó con la redacción de esta nota.