Defendamos la Paz, un movimiento creado para defender la integridad del acuerdo de paz con las Farc, le pidió al asesor especial de la ONU para la Prevención del Genocidio, Adama Dieng, que visite Colombia y “lance una alerta mundial” por el “creciente número” de asesinatos de líderes sociales y excombatientes de las desmovilizadas Farc.

Este movimiento hizo pública una carta dirigida a Dieng en la que señala que “los asesinatos selectivos no se detienen y la crisis humanitaria de los sectores más vulnerables de la población en diferentes territorios de la geografía nacional”, van en aumento. 

“El rol que usted desempeña en materia de prevención de crímenes atroces resulta de vital importancia ante el crítico escenario que se vive en el país y ante la incapacidad institucional para controlar y atacar la ola de crecientes crímenes que estamos viviendo”, dice parte de la misiva.

El movimiento añade que la documentación y el análisis de esta situación “corresponden a las competencias y funciones” de la oficina de Dieng, “en tanto su mandato no se limita a genocidio” y por lo que su intervención en el país “será de gran ayuda para las comunidades más afectadas por la crisis humanitaria”. 

La plataforma que defiende el acuerdo de La Habana advierte que el entorno de violencia genera “incertidumbre y miedo en los demás excombatientes y pone en riesgo su integración plena a la sociedad”, lo que se traduce en un obstáculo para futuros procesos de paz y para la aspiración del pueblo colombiano a “gozar de una paz completa, estable y duradera”.

Según el último informe del secretario general, presentado al Consejo de Seguridad, las Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha verificado 303 asesinatos de lideres y defensores, con 86 casos ocurridos en 2019; así como el alto número de crímenes de excombatientes de las Farc, con 77 casos en 2019, 65 en 2018 y 31 en 2017, para un total de 173 desde la firma del Acuerdo Final de Paz. 

Para el movimiento, el Acuerdo del Teatro Colón “constituyó un momento de esperanza” para el país, pero lamentó que “la limitada voluntad política del actual Gobierno (en cabeza de Iván Duque) ha hecho que la implementación integral de los acuerdos se vea obstaculizada y sus avances sean limitados”.